El trabajo por tierra y por aire no da abasto para controlar los incendios forestales en Bolivia que persisten desde hace tres meses. Amnistía Internacional instó a los países de la región a evitar una catástrofe climática en la Amazonía a causa del fuego. Desde el Gobierno informaron que encaran un ataque “masivo y seguido” en la “cabecera de los incendios”, especialmente en la zona de la Chiquitanía, precisó el viceministro de Defensa, Juan Carlos Calvimontes. Sin embargo, los bomberos y voluntarios aseguraron que las tareas son insuficientes. En Urubichá, en Ascención de Guarayos, en el norte cruceño, el fuego está a unos 3 kilómetros del pueblo, lo que genera temor de la población, alertó el voluntario de Rescate Cochabamba, Ronald Copa. Pedido de Amnistía Amnistía Internacional pidió a los presidentes de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Paraguay y Perú una “respuesta sin precedentes” para “evitar una catástrofe climática” ante los incendios que azotan la región desde hace dos meses y que han arrasado millones de hectáreas en la cuenca amazónica y en otras áreas protegidas. “Las presidencias suramericanas deben, más que nunca, tomar medidas urgentes para evitar una catástrofe climática que podría tener consecuencias irreversibles para toda la humanidad. El momento de actuar es ahora”, exigió Amnistía Internacional. Asimismo, pidió que se garantice la libre determinación de los pueblos indígenas, que son “especialmente vulnerables al cambio climático” debido a su estrecha relación con el entorno natural, del cual dependen para su subsistencia y cultura. La marcha indígena chiquitana que salió el jueves de El Pailón llegó hasta la ciudad de Santa Cruz.