Las aguas bajan en Pando y las tareas se enfocan en la limpieza y la prevención de enfermedades

El desborde de los ríos Acre y Tahuamanu, en el departamento de Pando, causó destrozos en los municipios de Cobija, Bolpebra, Filadelfia y Porvenir. De todos ellos, Cobija resultó el más afectado, pues más de cinco barrios y tres comunidades se vieron inundadas, afectando a más de 500 familias. A una semana de los hechos, las aguas retrocedieron y las tareas de ayuda a los damnificados están mostrando buenos resultados. La alcaldesa de Cobija, Ana Lucía Reis, informó que tanto autoridades y funcionarios de distintas instituciones, también los vecinos, intensifican las tareas de limpieza de calles y viviendas, tras el descenso de las aguas. “Gracias a Dios, estamos en el ‘posindundación’, bajaron las aguas, ahora corresponde realizar los trabajos de limpieza y de desinfección en los barrios. Varias familias han retornado a sus viviendas, eso es importante”, señaló la alcaldesa. “Hoy compartimos un grato desayuno con el grupo de rescate del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, aprovechamos la ocasión para resaltar la importante y loable labor que realizan. Estamos muy agradecidos por la ayuda que brindan a las familias damnificadas”, expresó la autoridad, que destacó el apoyo de autoridades de los ministerios de Defensa y de Salud, como también de la Alcaldía de La Paz, que hizo llegar dos toneladas de ayuda humanitaria, además del apoyo de gente de diversos sectores, como las Cruz Roja Filial Pando, las UGR de la Alcaldía de Cobija, la Fejuve Cobija y la Promoción 2023 de la Unidad Educativa Defensores del Acre. Por su parte, el asesor del Ministerio de Defensa, Adhemar Valda, informó que la situación está controlada y que se está pasando a una fase de rehabilitación. Asimismo, señaló que se continúa enviando la ayuda humanitaria pertinente. “Seguimos generando los mecanismos para entregar la ayuda humanitaria. Se ha entregado cinco toneladas de ayuda por parte del Ministerio de Hidrocarburos, además del apoyo del Ministerio de Salud y Deportes”, expresó Valda. La cartera de Salud hizo llegar pastillas potabilizadoras, medidores de cloro portátil, reactivos para la determinación del cloro y sobres potabilizadores de agua para 5.000 litros. En Cobija se instalaron seis albergues que concentraron alrededor de 200 familias perjudicadas. “Estamos garantizando, con las Fuerzas Armadas, la limpieza de las viviendas que han sido anegadas. Cuando ha llegado la riada, ha traído restos de lodo, de basura y de plantas. La gente, gradualmente está dejando los albergues y están volviendo a sus casas. Se está generando poco a poco la normalidad”, dijo Valda a Bolivia TV. A su vez, el gobernador de Pando, Regis Richter, señaló que la Gobernación apoyó en el traslado a las familias que fueron afectadas por la inundación en Cobija. “El equipo operativo del Sedcam y otras áreas del Gobierno Departamental se pusieron a disposición de la gente con vehículos y personal humano para que estas familias puedan regresar a sus domicilios”, expresó Richter. Los trabajos se intensificaron este domingo en la capital pandida, donde las brigadas de limpieza ingresaron a los barrios Mapajo, Junín, Villamontes, Puerto Alto y Cataratas, que quedaron cubiertos de lodazal y olores fétidos.